Nubes de palabras, otra innovadora forma de análisis bursátil

En menos de 15 minutos puedes hacerte una idea muy aproximada sobre cualquier tema que quieras investigar fijándote únicamente en las palabras más destacadas. En la imagen un ejemplo de nube de palabras de la empresa BME.

En menos de 15 minutos puedes hacerte una idea muy aproximada sobre cualquier tema que quieras investigar fijándote únicamente en las palabras más destacadas. En la imagen un ejemplo de nube de palabras de la empresa BME.

Imagina que quieres hacerte una idea rápida sobre alguna empresa de las que cotizan en el IBEX, pero no te fías demasiado de los análisis (tanto técnicos como fundamentales) que hacen los analistas porque sabes que muchos fallan como una escopeta de feria.

Lo ideal sería leerse todos los análisis técnicos y fundamentales que realizan los diferentes analistas para ver en que cosas están de acuerdo la mayoría y en cuáles no están de acuerdo. La lógica dice que, a mayor consenso, suele ser mayor la fiabilidad de la información.

He descubierto que las nubes de palabras dan una idea bastante buena sobre cualquier tema que queramos investigar. Si aplicamos las nubes de palabras a la Bolsa, podemos obtener muy buenos datos sin tener que perder horas o días leyendo las diversas informaciones que encontramos por Internet.

Una forma sencilla y atractiva para mostrar de manera gráfica las palabras más frecuentes de un texto son las nubes de palabras (del inglés “word cloud”).

En dichas nubes se muestran de manera desordenada las palabras más frecuentes de un texto cualquiera. Lo más importante es el tamaño de las palabras: cuanto más frecuente sea la palabra, más grande aparecerá en la nube.

Voy a poneros un ejemplo práctico de la metodología que utilizo y de cómo obtengo resultados a partir del análisis de nubes.

Imagina que quieres información sobre alguna empresa que cotiza en el IBEX. Por ejemplo, queremos obtener información sobre las acciones de Bolsas y Mercados Españoles (BME). Suponemos que no tenemos ni idea sobre dicha empresa y que desconocemos todo sobre su funcionamiento.

El primer paso es recopilar toda la información posible sobre BME. Para ello abrimos el navegador y, utilizando cualquier buscador, buscamos “Análisis BME”. Con ello obtenemos enlaces que nos llevarán tanto a páginas de análisis técnico como a páginas de análisis fundamental sobre BME. Dichos análisis habrán sido realizados por todo tipo de analistas: buenos, regulares, mediocres, aceptables, etc.

Como no sabemos de quién podemos fiarnos y de quién no, en este primer paso nos limitaremos a abrir un archivo de texto e iremos copiando en dicho archivo todos los análisis que encontremos. Es tan sencillo como ir abriendo enlaces en el buscador y en el navegador, marcar todo el texto con el ratón y dar a copiar y pegar en nuestro archivo de texto. En este proceso no perdemos ni un segundo en leer los diferentes textos porque a nosotros lo que nos interesa es comparar las distintas opiniones, así que nos limitamos a ir haciendo un largo churro de texto con todos los análisis que seamos capaces de encontrar.

Una vez recopilada toda la información en bruto y que tenemos nuestro super-macro-texto preparado, lo pasamos por un procesador de palabras que nos construya la nube de palabras.

Como ejemplo, os muestro la nube de palabras que he creado con diferentes análisis, tanto técnicos como fundamentales, de la empresa BME. Como buscadores he utilizado Google y Yahoo para que la muestra de análisis sea un poco más diversificada.

Mirando la nube, y recordando que las palabras más grandes son las más frecuentes en nuestro super-macro-texto, ¿qué podemos deducir de BME? En la nube se ve claramente cuáles son las palabras más frecuentes. ¿Por qué esas palabras y no otras? ¿Qué nos dicen esas palabras sobre BME?

Vemos que destaca el nombre de la empresa, BME, cosa lógica, pero también llaman nuestra atención las palabras: dividendos, mantener, lateral, rentabilidad.

A grandes rasgos la nube de palabras me está diciendo que las acciones de BME se suelen mover de forma lateral, y que conviene mantener las acciones a largo plazo, según el consenso, por su excelente rentabilidad en forma de dividendos.

Para enunciar esa frase solo he tenido que ir buscando las distintas palabras en mi super-macro-texto. Por ejemplo, buscando la palabra “mantener” he visto que la mayoría de los analistas recomiendan mantener las acciones como inversión a largo plazo. Buscando “dividendos” he visto que la mayoría alaban los jugosos dividendos que da BME a sus accionistas, etc.

En total he empleado en todo el proceso unos 15 minutos, no he perdido tiempo leyendo los diferentes análisis y como podéis ver me ha dado una primera aproximación bastante buena a una empresa que se supone que desconocíamos por completo. Todo parece indicar que BME es una buena empresa para comprar algunas acciones a largo plazo pensando en la rentabilidad de los dividendos.

Llegados a este punto me preguntarás: ¿Y cómo se crean las nubes de palabras?

Crear una nube de palabras a partir de un texto es bastante sencillo. Existen en Internet herramientas disponibles que lo hacen. Aquí os dejo la que he utilizado yo: http://www.wordle.net/

Probadla. Basta con tener un texto a mano. Veréis que los análisis en bruto que realiza son bastante aproximados a la realidad.

Por citaros un ejemplo, a mí el análisis de la nube de palabras me avisó de la debacle de Pescanova justo cuando todos los analistas la recomendaban. No puedo poner la nube porque la borré hace tiempo, pero me pusieron en guardia palabras como “problemas”, “deuda”, “riesgo” enfrentadas a “comprar” como recomendaban la mayoría de los analistas. Me pregunté: ¿comprar algo que tiene problemas, deuda y riesgo? No parece muy aconsejable, ¿verdad? Pocos días después las acciones de Pescanova caían en picado. Menos mal que no hice caso a todos los que recomendaban comprarlas. El análisis de la nube me sirvió para que se me posara la mosca tras la oreja y refrenara mi idea inicial de comprar.

Por supuesto, este tipo de análisis es otro tipo de análisis más que podemos emplear. Ni que decir tiene que jamás recomendaré emplearlo exclusivamente sino como otra herramienta más a nuestra disposición y que podemos utilizar en conjunción con el análisis técnico, el fundamental, los indicadores, etc.

También vale para otras cosas como hacerse una idea de la temática de un blog analizando las palabras más empleadas o para descubrir qué temas preocupan más a los inversores. Se pueden analizar foros, páginas web, y es capaz de desmenuzarnos los textos más coñazos, más aburridos y más soporíferos que podamos tener necesidad de analizar sin morir en el intento. Te invito a descubrir las posibilidades que brinda este nuevo tipo de análisis y ni que decir tiene que estaré encantado de escuchar tus comentarios. Espero que te haya resultado útil esta información.